sábado, 14 de julio de 2012

Haiku de lo sagrado


Hacia allá... 
Hacia acá...  
El sonido y las olas.
...............
 En alguna parte 
Detrás de las nubes  
La luna llena.

 (Giovanni Jara)
***

 Oscurece...
ya no suena igual

el agua entre las piedras.


JL. Vicent (Barlo)
*** 

Pide limosna
el eco de su voz
en la plazuela.
.............
 La mariposa muerta.
El viento aún
mueve sus alas.

(Enrique Linares)
***

  Sencillamente
mi madre da comida
a las gallinas.
...................
 Hace la lumbre
con la última leña
que cortó su padre.

( Manuel Díez)
***

Almendro en flor
al pie una culebra
medio aplastada.
...............
Dentro de clase
la araña también
está callada..

Rafael G. Bidó)
***

..............................................

hacia allá...
hacia acá...
el sonido y las olas.
............
  en alguna parte
detrás de las nubes
la luna llena.
.................
 Oscurece...
ya no suena igual
el agua entre las piedras.
.....................
 Pide limosna
el eco de su voz
en la plazuela.
...............
 Sencillamente
mi madre da comida
a las gallinas.
................
Hace la lumbre
con la última leña
que cortó su padre.
.................
  Almendro en flor
al pie una culebra
medio aplastada.
...............
La mariposa muerta.
El viento aún
mueve sus alas.
.................
  Desde muy lejos
el viento entre los árboles...
y ya está aquí.
...................
En la mudanza
lo último que llega:
los peces de colores. 
.................
 Dentro de clase
la araña también
está callada..
.................
 Sobre los hombres
y sobre las montañas
cae la lluvia.
...................
Tras la disputa...
un cristalito roto
brilla en el suelo
................
"Nada puede decirse,
pero hay que decir la nada." 
............
   Amanece,
las sombras otra vez
son montañas.
...................
 Así es la alondra:
una voz que cae en picado y,
cuando la busco, Nada.
..................




Un haiku es una instántanea de la realidad. En japonés "espíritu de shasei" que significa :"reflejar lo que uno presencia". (a)

hacia allá...

hacia acá...

el sonido y las olas.

El hombre no necesita un camino a la espiritualidad está en ella. Lo propio de él es asombrarse por el contacto con el mundo. Entonces se nos hace preciso un camino para llegar a esa inocencia. Y ese camino se construye desde la sensibilidad. Vibrar con lo que nos rodea, ser instrumentos sensibles en manos de nuestro exterior. El objetivo final: "sentir el mundo", aunque a veces solo lo intuyamos:

en alguna parte
detrás de las nubes
la luna llena.

Un haiku -decía Bahsô- es lo que ocurre aquí y ahora.(b) Según la tradición mística más universal "ahora" es el tiempo sagrado.

Oscurece...
ya no suena igual
el agua entre las piedras.

Un haiku no intenta explicar la realidad, ni teorizarla, incluso ni la embellece, el haiku no transforma el mundo, te pone en contacto con él, te lleva a él, te introduce en él.

Pide limosna
el eco de su voz
en la plazuela.

Incluso en los momentos más cotidianos hayamos gotas de espiritualidad.

Sencillamente
mi madre da comida
a las gallinas.

El haiku no está hecho para meditar, porque para él "lo sagrado" no es algo para comprender , sino para sentir. El haiku contempla. "Contemplar" es mucho más que mirar intensamente. Contemplar es estar. No solo "estar" sino estar absolutamente. Mirar no sirve, mirar es estar al margen.
Todo es sagrado porque todo puede ser digno de un haiku.

Hace la lumbre
con la última leña
que cortó su padre.

Todo es objeto poético, toda realidad merece quedar fijada en la memoria colectiva; todo merece su fotografía...excepto el fotógrafo.

Almendro en flor
al pie una culebra
medio aplastada.

La mariposa muerta.
El viento aún
mueve sus alas.

Es por eso que escribir haiku es una vía, un entrenamiento del "yo". Un despertar de los sentidos,de atención, de naturalidad, de autenticidad, de paciencia, de desprendimiento, de extinción de vanidad...Los maestros de haiku nos enseñan que el poeta debe eliminarse de su poesía para que sus versos capten la esencia dinámica y limpia de la realidad. Lo que importa es lo que está fuera del hombre y no lo que sucede dentro. Si no acallamos nuestro interior permaneceremos ajenos a la realidad que nos rodea..

Desde muy lejos
el viento entre los árboles...
y ya está aquí.

El deseo de escribir un haiku conlleva recuperar la inocencia. Todo es necesario en el haiku. Todo aquel que haya convivido con un niño ha comprobado como nos enseñan a seleccionar de entre la infinitud de objetos poéticos que nos rodean, los asombros mas elementales, los que pasan más desapercibidos:

En la mudanza
lo último que llega:
los peces de colores.

Dentro de clase
la araña también
está callada..

"Lo esencial es invisible a nuestros ojos". (c) Muchas veces el haiku no dice literalmente lo importante que esconden sus versos, y así, sin decirlo, lo hace infinito:

Sobre los hombres
y sobre las montañas
cae la lluvia.

Tras la disputa...
un cristalito roto
brilla en el suelo

"Nada puede decirse,
pero hay que decir la nada." 
(d)Decir la Nada, eso es el haiku. "Una Nada inolvidablemente significativa".(e)Es la excepción a nuestro habitual parloteo de palabras. Algo que nos demuestra que estamos vivos y atentos al mundo.

Amanece,
las sombras otra vez
son montañas.

Posiblemente el haiku busque el origen de esa humana ansiedad espiritual. Es la poesía de la sencillez, de la sinceridad, de la espontaneidad, de la sobriedad, de la soledad, del silencio, en una palabra, la poesía de la pobreza. Pobreza en el sentido de que sólo se sugieren las sensaciones o intuiciones de un momento.

Por eso quizá el haiku surge del silencio del escritor y se dirige al silencio del lector. (f)

Así es la alondra:
una voz que cae en picado y,
cuando la busco, Nada.

Autores de los haikus correlativamente: 1 y 2 Giovanni Jara, 3 Mila Villaneva, 4 Enrique Linares 5-6Manuel Díez, 7-11-17 Rafael G. Bidó, 8 Enrique Linares 1oAnónimo japonés 12 Ana Angela Linares, 13 Patricia Marrades, 18 Ampù.
(a) Textos extraídos de libros de Vicente Haya. (b) Matsua Bhasô (c) El Principito de Saint -Exupéry (d) Texto del poeta Martín Portales.(e) Texto exttraído de R.H. Blyth. (f) Extraído de un libro de J.L. Andrés Cebrián.